ARTÍCULOS,  Riojadigital

EL SISTEMA GASISTA CLAVE EN LA DESCARBONIZACIÓN. Capítulo V.- Escenario al 2050: Los gases renovables

Los gases renovables

La descarbonización de la economía europea al 2050 supondrá que las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) tienen que disminuir como mínimo un 85% y es muy posible que la nueva Comisión Europea (CE) incremente este objetivo, para alcanzar en 2050 la neutralidad climática, dentro de un mercado único interconectado.

El gas natural es la más limpia de las fuentes fósiles de energía. Contribuye a mitigar el calentamiento global porque es la que menos emisiones de CO2 genera y al tiempo produce menos emisiones contaminantes de NOX, SOX y partículas magnéticas que las restantes fuentes fósiles.

Pero a pesar de ser la fuente de energía más virtuosa, es una energía fósil que debe ser descarbonizada a largo plazo para cumplir con los objetivos acordados para el año 2050 y para ello el gas se debe transformar.

Esto supondrá descarbonizar el gas natural, a través de diferentes tecnologías en gases renovables, básicamente biogás/biometano e hidrógeno, también conocidos como energías renovables no eléctricas.

Los gases renovables

Los gases renovables

La economía circular

• Las directivas europeas de gestión de residuos van a prohibir arrojar la materia orgánica a vertederos y esparcir los residuos ganaderos (estiércol, purines, etc…) por el campo para evitar tanto la contaminación del aire como las aguas, por lo que va a obligar a partir de 2020 a modificar la legislación española para una correcta y eficiente gestión de los residuos.

Los gases renovables son combustibles neutros en emisiones de CO2, que mejoran la gestión medioambiental de los residuos orgánicos conflictivos (residuos orgánicos, deyecciones ganaderas,…) reforzando la economía circular mediante el aprovechamiento de los residuos de energía y apoyando el desarrollo rural.

• La economía circular es un cambio de paradigma, cuya base es evolucionar de un modelo de consumo lineal (recurso – producto – residuo) a un modelo de consumo circular (recurso – producto – reciclaje – recurso).

• Por lo que el  futuro pasa por un impulso decidido por la economía circular mediante la valorización de los residuos.

El Hidrógeno como alternativa real

• Es el elemento más abundante del Universo, aunque prácticamente inexistente en su forma molecular. Sin embargo, como compuesto lo hay en cantidades casi incalculables, siendo el más frecuente el agua.

Con los excedentes de la energía eólica y termo – solar se puede aprovechar para producir H2 mediante la electrolisis del agua, y almacenarlo en la red de gas natural para volver a generarlo mediante una pila de combustible.

El H2 es clave en el proceso de descarbonización ya que es una forma muy eficiente de acumular energía. Todos los estudios de la UE indican que se va a requerir una necesidad de almacenamiento de energía renovable y el H2 aparece como una de las soluciones más eficientes, sobre todo para almacenar grandes volúmenes de energía en las infraestructuras del sistema gasista.

• El H2 se considera como la energía más atractiva para el futuro próximo debido a que su combustión no resulta contaminante ya que genera únicamente vapor de agua y que la energía total liberada en su combustión es superior en unidad de masa a la de cualquier otro tipo de combustible.

La descarbonización de la economía

Probablemente la descarbonización de la economía europea al 2050 sea el objetivo que represente el mayor desafío energético de nuestra Sociedad y es muy posible que la nueva Comisión Europea incremente el mismo para alcanzar en 2050 la neutralidad climática.

Para alcanzar este objetivo caben dos posibles planteamientos:

• Un sistema de energía que contemple una electrificación casi completa de todos los sectores (aprox. 100% electrón) y representa un modelo menos eficiente ya que genera unos costes de nueva infraestructura muy elevados y con muchos condicionantes para su autorización. Además algunas aplicaciones como el transporte pesado por carretera, el transporte marítimo y la industria intensiva en energía (acero, cemento, aluminio, química, papel…) tendrían mayores costos al emplear electricidad.

• Otro sistema de energía muy descarbonizado con un nivel alto de electricidad renovable (¿75%? electrón) y una importante contribución de las energías renovables no eléctricas (¿25%? molécula) como son el biometano y el hidrógeno, que además pueden ser transportados por las infraestructuras del sistema gasista.

La descarbonización de la economía

• Es muy improbable que la producción renovable sea capaz de proporcionar toda la electricidad que necesitamos de una manera efectiva en costes. Se necesitará una energía que de respaldo a dicha producción.

• La electricidad no se puede suministrar de forma razonable  a la industria intensiva en energía, como la del acero, cemento, química, etc…

• No se espera tampoco que la tecnología de baterías llegue a ser lo suficientemente ligera y potente para ser usada en el transporte pesado o para el almacenamiento de energía con carácter estacional.

• Pero incluso si teóricamente pudiéramos utilizar la electricidad para todas estas necesidades, resultaría un coste de transporte y distribución altísimo y es muy cuestionable que seamos capaces de construir la inmensa cantidad de líneas eléctricas necesarias.

• Por tanto, parece que un enfoque solo eléctrico será mucho mas costoso que un modelo hibrido, en el que las fortalezas de la infraestructura del sistema gasista unido a un sistema eléctrico renovable se utilicen para un sistema energético sostenible y seguro que proporcione la energía necesaria a los consumidores finales.

Principales conclusiones

  • Descarbonizar no significa electrificar la economía, dado que la electricidad no puede dar respuesta a todo y esta limitada tanto técnica como económicamente.

• En el escenario al 2050, la descarbonización total de la economía necesitará la participación de todas las energías renovables: eléctricas y no eléctricas (Biogas/Biometano e Hidrogeno verde) y será probablemente el escenario mas competitivo, sostenible y eficiente.

El sistema gasista puede ayudar significativamente a la descarbonización de forma activa, al contar con una capacidad de almacenamiento de energía importante (90.000 Km en España y 2,2 Millones de Km en Europa), tanto para el gas que consumimos hoy en día como para los gases renovables que se necesitarán para alcanzar la neutralidad climática (2050).

• El H2 verde, se posiciona como el vector de cierre del sistema energético,  cuenta con un potencial ilimitado, capaz de permitir el almacenamiento estacional de la energía y cubrir la demanda de los “sectores duros” .

  • Serán las fuentes de energía mas limpias, competitivas, con garantía de suministro y que aseguren el acceso universal de la energía a todos   los ciudadanos las que finalmente prevalecerán.

Nuestra apuesta:

Creemos en el proceso de descarbonización y estamos convencidos que es el camino a seguir.

Nuestra apuesta son los gases descarbonizados y el hidrógeno.

Fernando López de Silanes
Director de Proyectos Especiales ENAGAS

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.