ENCORSETADOS POR UNA PANDEMIA

Comenzamos el 2021 tras haber atravesado el peor año de la historia reciente de la humanidad. Todos intentamos de una manera bastante evidente dar carpetazo a un año catastrófico a distintos niveles. Aun así, y lejos de lo que sería habitual, el recibimiento de éste ha sido muy discreto, fruto de la sombra de una pandemia que sigue presente y acecha nuestras vidas.

Ha transcurrido prácticamente el primer mes y la situación se ha recrudecido a nivel de contagios en toda España. Un claro ejemplo de esto es que el hospital de pandemias Isabel Zendal ha anunciado la apertura del pabellón 3 con 352 camas, despliegue por fases que ya estaba contemplado inicialmente por el ejecutivo madrileño en el momento de su construcción. De esta forma, es posible hacer frente y poner a disposición de la sanidad pública de Madrid de un mayor número de camas ante un coyuntural aumento de los pacientes covid. En esta misma línea, el pasado día 22 de enero la Comunidad de Madrid dictó un comunicado que recoge y pone de manifiesto nuevas medidas excepcionales para su aplicación durante un periodo de dos semanas, intensificando las restricciones a cumplir por los ciudadanos madrileños.

Dicha situación nos hace reflexionar minuciosamente, teniendo que adaptar a la nueva reglamentación los actos y eventos que se llevarán a cabo en el Centro Riojano en las próximas fechas. La sensatez y la prudencia tienen que primar en todos los actos, máxime en aquellos que están relacionados con las actividades vinícolas y de carácter gastronómico, tan comunes, tan solicitadas y prestigiosas en nuestra entidad. Por este motivo nos hemos visto obligados a aplazar tres de estos acontecimientos. Presumiblemente iban a coincidir en tiempo con la mayor tasa de incidencia y de contagios de esta tercera ola, situación que empieza a recordarnos y a tener similitudes con esos momentos previos a los instantes más duros de la primera.

En el Centro Riojano estamos siempre al lado de los socios para ofrecer lo mejor de nuestra inspiración en la organización de eventos, buscando ese toque de innovación en una agenda cultural con la vista siempre depositada en la promoción de La Rioja. Desde la Junta de Gobierno tenemos que adoptar decisiones y desde prácticamente hace un año, las hemos tomado según iban aconteciendo los cambios que tan drásticamente ocurrían a nivel político y sanitario, casi como los reales decretos que se aprobaban consecuencia de la excepcionalidad de la situación. En todo momento hemos tratado y tratamos de buscar la mejor opción para los intereses de la Casa. La realización de cualquier acto en los tiempos actuales tiene que estar muy madurada, contemplando todos los aspectos que rigen las medidas de protección, distanciamiento interpersonal e higiene. Uno de los objetivos de la puesta en marcha de cualquier acto es que este pueda ser disfrutado de una manera más o menos normal por sus asistentes.

Bajos estas premisas creo que lo mejor es moldear la realización de los actos según las características de los mismos. Una decisión muy adoptada por otras entidades u organizaciones a nivel nacional ha sido suspender de raíz todos los eventos hasta nueva orden. Es una decisión totalmente aceptable y sobre todo respetable. Desde mi punto de vista no todo es blanco ni todo es negro, existen escalas de colores en medio que hacen que la existencia sea más llevadera. Mientras la legislación vigente y las normas lo permitan, nos tenemos que adaptar a ellas para sacar lo mejor de nosotros ante la peor situación. El último comunicado de la Comunidad que ha entrado en vigor bajo Real Decreto es muy evidente; los eventos culturales se pueden seguir desarrollando en interiores con aforos del 75 %, siendo éstos una excepción contemplada a la norma general de la disminución al 50 % de capacidad establecidos para toda la región.

No todos los actos requieren del mismo despliegue para su ejecución. Para que nos hagamos una idea, en el Centro Riojano celebramos conferencias o presentaciones diversas con una duración limitada a 1 – 1,5 horas. Como ha ocurrido hasta el presente, manteniendo las medidas sanitarias que pusimos en marcha una vez reanudamos la actividad en el mes de septiembre, pueden llevarse a cabo con total normalidad. En cambio, otros eventos necesitan de más tiempo, estando involucradas un mayor número de variables que hacen que su realización en el plano situacional vigente precise de ciertos malabares.

Es deseo generalizado que la intensidad vírica con la que ha empezado este 2021 vaya perdiendo fuerza día tras día, y que en su lugar se reemplace por un aumento de la ilusión de los ciudadanos y de todos los socios del Centro Riojano de Madrid.