ENTREVISTA A SANTIAGO URIZARNA

Conocí a Santiago hacia el año 1985. Él trabajaba en Imprenta Moderna como técnico de montaje y yo entre de técnico-comercial. Enseguida congeniamos pues cuando yo tenía alguna duda, me acercaba a su mesa de luz (entonces los fotolitos se montaban a mano y las selecciones de color también) y él me la solucionaba. Estuvimos así durante 5 años. Después yo me fui a otra empresa y no perdimos el contacto, pero si la asiduidad. Tuvo una etapa de asesor de nuestra recordada Pilar Salarrullana, en la Concejalía de Medio Ambiente y Circulación. Recuerdo que me encargó el diseño de una peana para una prensa de vino que se iba a colocar en el Espolón. Al final se colocó en un parterre detrás de la estatua del Labrador y no con mi diseño de peana, creo que con otro más sencillo y por supuesto más barato. Hacia el año 2000 nos volvimos a reencontrar. Él ya se dedicaba a labores humanitarias y había empezado a pintar unas acuarelas preciosas, al estilo Zobel. Desde entonces quedamos casi todos los viernes a tomar un vino y hacemos disquisiciones sobre lo divino y lo humano y por supuesto también sobre arte.

¿Por qué te decantas por el mundo de las Artes Gráficas?

Comienzo a trabajar joven y aprovechando que sacaba buenas notas en dibujo en Bachillerato, tuve la oportunidad de entrar a trabajar en Graficas González en Logroño; luego en Vitoria, en Graficas Santamaría; después Madrid y regresé a Logroño en Imprenta Moderna. Era un mundo apasionante entre el color, la técnica y el papel. Aprendí que con la combinación de cuatro colores salen todos los colores  

En el arte prefieres la acuarela, ¿cómo fue esa decisión?

Me sorprendió que con una cajita de acuarelas, sin mancharte, sin olores y en un sitio reducido, se puede pintar. Pintar con acuarelas es pensar primero lo que puedes hacer, pintar con decisión, rápido, suelto, manejando el agua y no insistiendo. Es una pintura que permite pocos defectos. Para mí es la pintura de la verdad y con riesgo.

Tienes un estilo -salvando las distancias- como Zobel, ¿te identificas con él?

Pues yo en principio no lo sabía, me lo dijeron y claro que luego le he seguido. Él jugaba con espacios muy grandes en blanco e integraba colores y líneas en negro. Tiene una pintura parecida a las orientales. También disfruto viendo los paisajes castellanos de Martínez Novillo con las machas certeras en los horizontes y simplificando los paisajes. Me estremece.

Además de las exposiciones a nivel nacional, ¿en qué países has expuesto?

He expuesto en Bulgaria, Rusia, Holanda y Francia. Mis pinturas son fáciles de exponer, son pequeñas dado que siempre he trabajado en tamaños pequeños

Aparte de tus acuarelas, ¿tienes otras pasiones?

Tengo algunas: me gusta el canto coral, leer y sí que tengo implicación en el mundo de la discapacidad intelectual siendo presidente de la Asociación Igual a Ti en Logroño que lo asumo como un compromiso social y muy personal.

Dinos tus planes para el futuro.

Mi principal plan es aprender. Internet me proporciona las posibilidades de conocimiento en tiempo y forma de cualquier materia. Creo que nos da la oportunidad de ofrecer el saber libre y gratis de muchas materias, lo que no lo podíamos imaginar y tampoco tuvimos el acceso en nuestros tiempos jóvenes.